viernes, 12 de noviembre de 2010

LA CULTURA DE LA REGIÓN DE ALTA VERAPAZ
Alta Verapaz es uno de los 22 departamentos de Guatemala, ubicado al noreste de la ciudad de Guatemala, al oeste del Departamento de Izabal, la frontera con México hacia el norte, Baja Verapaz hacia el sur, y El Quiche hacia el oeste. La cabezera y ciudad más grande en Alta Verapaz es Cobán.
El terreno en esta región es montañoso cárstico, proporcionando un buen drenaje de la lluvia casi constante que recibe esta área. Se encuentran bosques de lluvia a las elevaciones y el bosque nuboso. Es un hermoso campo con densos bosques y cascadas. Algunas áreas son una reminiscencia de los prados alpinos, pero obviamente no tan frío. Casi todo tipo de plantas y arboles pueden crecer aquí. Uno puede encontrar espectaculares bosques de pinos junto a las palmeras, plantas de banano, y los prados de hierba. Alta Verapaz es también conocida por sus orquídeas, incluida la flor nacional de Guatemala, la Monja Blanca.
La geología de karst a menudo resulta en sistemas de cuevas y ríos subterráneos que son abundantes en este departamento. Espeleólogos tienen mucho de donde elegir, incluyendo Chisec Lanquín, San Juan Chamelco y Esmeralda.
La región de Alta Verapaz ha sido ocupada por miles de años por los Mayas y fue parte de la gran civilización Maya. Este departamento tiene una historia única en la que los Españoles tuvieron grandes dificultades para conquistarla. Los Españoles conquistaron la mayor parte de lo que hoy es Guatemala en la década de 1520, pero los Mayas en Alta Verapaz la defendieron con vigor y hubo mucho derramamiento de sangre. Una de las figuras famosas de la historia de Guatemala, Fray Bartolomé de las Casas, sugirió que podría ser posible conquistar esta región de forma pacífica. El fraile intervino y convenció al rey Maya Kekchí a convertirse al Cristianismo para evitar más derramamiento de sangre. De ahí surgio el nombre del departamento, Verapaz.
En los siglos que siguieron, Alta Verapaz fue descuidada en gran medida tanto que la cultura Maya se conserva. El pueblo siguió practicando su propia religión, hablando Kekchi, y el gobierno local de la aldea continuó bajo el sistema Maya de ancianos de la aldea.
Un departamento llamado Verapaz se creó en 1825, que comprendía la zona que hoy es de dos departamentos, Alta Verapaz y Baja Verapaz. El 4 de Mayo de 1877, el Decreto Ejecutivo 181 dividió el Departamento de Verapaz en Alta y Baja Verapaz.  Véase la cronología
En la década de 1870, las cosas empezaron a cambiar rápidamente. El gobierno de Guatemala ofreció incentivos de tierra y dinero para que los Europeos vinieran a Alta Verapaz y desarrollarlo. Los que vinieron eran principalmente Alemanes intención de la creación de plantaciones de café y cardamomo. Pronto hubo grandes plantaciones tan grandes como 100.000 acres, pero las cosas no fueron buenas para los campesinos que viven en la zona. Se instituyó un gobierno opresivo y estricto en la región y una forma de servidumbre por deudas se puso en marcha. Los campesinos fueron obligados por ley a trabajar en las plantaciones y obligados a efectuar la identificación y documentación de su historial de trabajo en todo momento. Los que no obedecieron fueron encarcelados. Este patrón de opresión continuó en el siglo 20. Durante el conflicto armado de 35 años que terminó en 1996, Alta Verapaz, junto con Huehuetenango y El Quiché, fue escenario de algunos de los peores hechos de violencia.
La agricultura sigue siendo la industria principal en Alta Verapaz. El suelo y el clima proporcionan buenas condiciones de crecimiento y la gran producción de café, frijoles, maíz, arroz, té, cacao, pimienta y cardamomo. Se están realizando esfuerzos para empezar a sembrar arándanos rojos y azules.
La llegada de los Alemanes en el siglo 19 tuvo una influencia cultural. La famosa cerveza de Guatemala, "Gallo", un Pilsener clásico, se produjo como resultado de la presencia de los Alemanes. En Alta Verapaz, Cobán, especialmente, se encuentran Guatemaltecos rubios, de ojos azules, y las pastelerías venden tortas y pasteles de influencia Alemana.
La atracción turística más popular en Alta Verapaz, Semuc Champey está ubicado a pocos kilómetros de Lanquín. Es uno de los lugares más bellos del mundo, con un puente de piedra caliza, cascadas, grandes piscinas naturales en varios tonos de azul, con cascadas de agua, y rodeado de exuberante vegetación tropical.
Este departamento fue escenario y testigo de la conquista pacífica a través de la evangelización cristiana, llevada a cabo por el fraile dominicano Fray Bartolomé de las Casas.
Buena parte de sus manifestaciones culturales están arraigadas a elementos de tradición q'eqchi' y poqomchi', esto, por la presencia de rasgos prehispánicos mayas. El trabajo de sus pobladores destaca con artesanías de jícaras pintadas, tejidos vistosos y productos metálicos, como chachales, que son los collares que lucen las cobaneras con sus trajes ceremoniales.
 La región de Alta Verapaz posee dentro de sus riquezas la enseñanza ecológica de Tzultak'a, Señor de los Cerros, quien, según la leyenda maya, cuida los elementos naturales, por lo que al destruirse, él castigará a quien cometa tal atrevimiento.
El visitante que recorre las tierras de Alta Verapaz no puede dejar de degustar el “kaq ik”, un caldo típico que se prepara con pavo, sazonado con samate, hierba propia de esa región.
Así también, este departamento es famoso por sus propios rituales como el paabanc, de petición y gratitud ante una imagen de culto y fe religiosa ancestral, sincretizada con el cristianismo católico, que se celebra acompañado de comidas y bebidas sagradas.
La región norte de Guatemala es una de las zonas más ricas, misteriosas, mágicas y únicas en la historia y la antropología del país, lo que la hacen diferente y única en el contexto de la cultura guatemalteca.
La presencia de rasgos prehispánicos mayenses en la cultura de las verapaces es significativo, ya que guardan una constante desde los tiempos más remotos hasta nuestros días, aunque resemantizados, hibridizados y mestizados, conservan con todo el vigor, la concepción del mundo y de la vida de las etnias poqomchi', q'eqchi' y de la k'iche' en parte de algunos municipios de esta inmensa zona.
No obstante, debe subrayarse que la etnia q'eqchi' constituye uno de los cuatro grupos étnicos linguísticos mayoritarios de Guatemala.
La población prehispánica estaba asentada en valles y montañas, con señoríos bien establecidos. Durante la conquista y colonización española, en el siglo XVI, la región de la Verapaz juega un papel preponderante, ya que sus habitantes presentaron tenaz y eficaz resistencia a la conquista, razón por la cual los españoles dominaron a este vasto territorio con el nombre de Tezulutlán, que significa "Tierra de Guerra" en idioma q'eqchi'.
Por otra parte, la región de la Verapaz en estos tiempos de conquista y colonización española, fue escenario de cada uno de los experimentos más excepcionales de la evangelización cristiana en el siglo XVI en el nuevo mundo: La Conquista Pacífica a través de la evangelización cristiana propugnada y llevada a cabo por el fraile dominico Fray Bartolomé de las Casas, en los primeros años del siglo XVI. Este proceso se inició con un convenio en 1537, siendo gobernador del Reyno de Goathemala, Alonzo de Maldonado, por medio del cual el territorio estaba bajo la jurisdicción de la Orden Dominica y de la Corona directamente, sin que pudieran penetrar ni encomendederos, ni hacendados españoles seglares. Esta conquista pacífica se puso en práctica lentamente. Por otro lado, al territorio llamado Tezulutlán por los conquistadores, el Emperador Carlos V decidió cambiarle el nombre por el de la Verapaz, según Real Cédula del 30 de octubre de 1547.
En la zona se desarrolla, por un lado la conversión pacífica que dura casi tres centurias, hasta el siglo XVIII, y por la otra, continúa la resistencia tenaz de los q'eqchi'es a terminar de rendir su mundo y su cultura.
En la memoria histórica q'eqchi' contemporánea, se tiene aún muy presente la resistencia y final conversión al cristianismo del último Señor q'eqchi', Juan Metalbatz, Cacique de San Juan Chamelco. Con ello los indígenas dieron por concluida su total resistencia. Sin embargo, actualmente se dice en la tradición oral que Juan Metalbatz aún vive, por lo que se ha convertido en la figura mítica que algún día liberará a sus súbditos del yugo mestizo. Juan Metalbatz se constituye así, en uno de los personajes más importantes de leyendas míticas de las verapaces.
Asimismo, hay que subrayar que otros procesos históricos marcaron el desarrollo sociocultural de la Verapaz y sus moradores, como lo fue la introducción de esclavos negros africanos durante el período colonial y el establecimiento de grandes haciendas, obrajes e ingenios de caña como los de San Gerónimo en Baja Verapaz. Así como la presencia de alemanes en su territorio desde finales del siglo XIX hasta antes de la Segunda Guerra Mundial, cuando se introdujo el cultivo intensivo del café.
Por razones administrativas, el vasto territorio de la Verapaz fue dividido en dos departamentos por el Gobierno de Guatemala, según Decreto 181 del 4 de mayo de 1877, surgiendo así la Alta y la Baja Verapaz.
De tal forma que la cultura de la región está profundamente amalgamada. Los procesos históricos señalados le dieron una impronta única, en la cual a la herencia prehispánica de las etnias mayanses, q'eqchi' y poqomchi', se suma la cultura occidental de ascendencia española, la negra colonial, la de otros grupos de inmigrantes asentados y desarrollados en territorio en un extraordinario y rico mestizaje. No obstante, por esos mismos procesos históricos, la cultura indígena se sobrepone en el proceso de simbiosis cultural y sincretismo religioso a las otras formas socioculturales, y es lo que actualmente se encuentra en el departamento de Alta Verapaz.
Por lo tanto, las tradiciones orales del departamento de Alta Verapaz mantienen una elevada presencia de elementos tradicionales q'eqchi'es y poqomchi'es, aunque también existen rasgos y formas literarias occidentales muy resemantizadas y casi absorbidos por la cultura q'eqchi'.
Las especies literarias orales que más privan en la región son las leyendas míticas, históricas y animísticas de espantos, aparecidos y ánimas en pena, así como antiguos tipos de cuentos populares maravillosos, de bandidos mágicos, de bobos e ingenuos, así como de animales y de fórmula.
Hasta el momento no se han reportado antiguas formas literarias de ascendencia occidental en verso como romances, romancillos y coplas, en el extenso departamento, a excepción de la ciudad de Cobán y sus barrios, que es donde se han encontrado verdaderas joyas de este tipo de literatura entre sus moradores mestizos.
En Alta Verapaz existen varios tipos de narradores tradicionales. Entre los q'eqchi'es, los contadores de historias se denominan Aj seereq' najteril na'leb'; en el área poqomchi' se les conoce como Aj q'orol re' najtiir laj b'anooj y en Cobán, en los barrios mestizos se les llama "leng¸eteros" o "cuenteros".
Estos contadores de historias son ancianos muy respetados en sus comunidades, por la versatilidad de su narración y la vastedad de sus conocimientos. Como en toda Guatemala, la acción de narrar se desarrolla en situaciones sociales tales como velorios, cabos de novena; atrios de las iglesias y en los parques de los poblados. Asimismo, se desarrolla en forma íntima en el hogar, alrededor de la casa paternal, en los patios y corredores de las viviendas.
En Alta Verapaz destacan los contadores de historia que sólo narran los mitos en ceremonias sagradas, en ocasiones rituales, y que reúnen todas las características del sacerdote maya. Así en la región q'eqchi' se les denomina, con inmenso respeto, Aj k'atol utu'uj y entre los poqomchi'es Aj k'atool. Estos dignatarios resumen en sí mismos toda la sabiduría e historia de su pueblo y su etnia.
La figura mítica literaria de Alta Verapaz es la de Tzultuká, Señor de los Cerros y Valles de la región.
El término Tzultak'a expresa el carácter bisexual de la divinidad, lo cual para el q'eqchi' es manifestación de la perfección y de la plenitud: cerro igual Tzul, es el hombre; y, valle igual Tak'a, que es la mujer.
Una característica de la persona o de la comunidad es su relación con Tz¸ltak'a , cuando se le ofrecen candelas o copal pom, y se le hacen las oraciones correspondientes, se espera recibir lo que se le ha pedido casi inmediatamente. Si no llegara a ocurrir así, la persona cargará la culpa sobre sí misma, asumiendo que no realizó bien las oraciones y los ritos. Generalmente el q'eqchi' busca las causas de los acontecimientos negativos en las oraciones y ritos no realizados adecuadamente.
Tz¸ltak'a tiene un contenido muy profundo para el q'eqchi'; es como el rostro, la cara de Dios, es el cerro, el valle y la tierra, el lugar donde siente y experimenta más frecuentemente la presencia del Dios Mundo.
Los q'eqchie's hacen mención de que existen trece grandes cerros o grandes Tz¸ltakaes que son: Raxón Tzunum, Shubyuc, Cha, Chajcoj, Tzunkín, Tac'caj, Chisguajagua, Cubilg¸itz, Chajmaic, Chijaal, Siab, Belebjú y Cojaj; éstos son de carácter masculino, la excepción de Caná Itzám que es la única mujer entre ellos.
El sincretismo religioso ha provocado que se identifique la deidad del cerro con el Dios cristiano; es por ello que para reverenciarlo colocan cruces en todos los puntos estratégicos de la naturaleza.
El etnólogo David Saper, afirma que "resulta curiosa la confusión india venerando simultáneamente al Dios Tz¸ltak'a y el Dios Cruz", y choca extrañamente ver cómo coloca en sus altares, lo mismo en las iglesias que en sus casas, imágenes de santos y cruces de madera, junto a antiguos ídolos de barro o piedra. Cuando el indio permanece en poblado, suele dirigirse solamente al Dios cristiano Cruz; pero al salir al campo, cruzar montañas y valles, atravesar bosques y llegar a tierras vírgenes que pretende colonizar, entonces se acuerda exclusivamente del Dios "de cerros y valles" (Tz¸ltak'a).
El q'eqchi' también reza o se comunica con Cacua Sak'e (Señor Sol), ésta es una relación más trascendente e incluso dentro de su práctica religiosa, menos frecuente, ya que es una figura más lejana, y por eso cree que no le escucha. Además del dios Tz¸ltak'a, y del dios cristiano de la Cruz, los q'eqchi'es veneran una tercera deidad que es el Sol (Cacua Sak'e), por ser el supremo dador y dispensador de todo bien para el hombre y para la tierra.
Dentro de la literatura oral y la cosmovisión del área, aparece una figura opuesta a Tz¸ltak'a: el K'ek (negro), que es considerado como un espíritu maligno que se le aparece de noche en forma de vaca o de otro animal. Este ser causa toda clase males.
De esta manera, se cree en Chahal y en Chisec, área q'eqchi', que Tz¸ltak'a se enamoró de una mujer, llamada Dominga, a quien regaló una flor en señal de compromiso para que le fuera entregada al padre de la muchacha. Cuando "la niña dio al padre la flor del Tz¸ltak'a, se convirtió en monja blanca de plata". De este modo, el padre de la Dominga se convence que es Tz¸ltak'a el que desea casarse con su hija. La muchacha se va a vivir con el Tuztaká al interior del cerro, después de realizar las ceremonias rituales correspondientes.
Cuando no se llevan a cabo "las antiguas costumbres", para pedir permiso a Tz¸ltak'a, para cazar animales, cortar árboles o utilizar las fuentes de agua, el Señor del Cerro castigo al transgresor. Así, aseguran en Cahabón que un hombre llamado Juan Cajbón llegó al pueblo viniendo de otras tierras y se asentó en las tierras de la aldea Setacalcab; allí tenía buenas cosechas de maíz, frijol, chile, yuca y otras plantas, también le gustaba el lugar porque había muchos animales. Juan se puso a trabajar. Así hizo su ranchito, su roza, cosas del campo y empezó a prepararse para la caza. Entonces, un día, salió acompañado de Miguel, su hijo mayor que era el encargado de guiar a los perros por aquellos guatales donde vive el venado, los tepezcuintles y el armadillo. Pero no encontraron nada, fueron varias veces, pero no encontraron al venado, cada vez que Juan tiraba le fallaba la puntería. Sólo cazaba uno que otro armadillo.
Entonces un día se fueron a cazar el venado a como fuera; pero lo que pasaba era que Juan no quería cumplir con la costumbre de quemar candelas, copal, pom, velar una noche antes pidiendo ante el altar de Tzultak'a, el permiso para entrar en sus campos a tentar a sus animalitos, pues Tz¸ltaká que es el señor de los cerros y los valles de por aquí, los tenía bien cuidados. El tenía que hacer muchas cosas que mandaba el señor del cerro; tenía que desahumar a sus perros con copal, pom; desahumar su casa, sus armas, dormir en el suelo frente al altar y, en fin, no hizo todo lo que mandaban los antiguos, que eran mandados por el señor de los cerros. Entonces Juan y su hijo Miguel salieron muy temprano para el cerro Julgix, allí se fueron seguidos de sus dos o tres "ezentzies" de los meros perros cazadores. Miguel que llevaba los perros se metió al guatal, mientras Juan se encargaba de atajar el paso del venado. Empezó pues la carrera y los gritos de Miguel alentando a sus perros; pero todo se arruinó porque los perros no ladraron y el venado no pasó por donde Juan estaba. Pasaron las horas y Juan no quería regresar a su casa sin su hijo, pero se cansó, y pensó que Miguel había regresado sin avisarle, cuando llegó y no lo encontró, regresó al monte a quien llamaba y silbaba, incluso la gente de la aldea lo ayudó, pero no lo encontraron. Al tercer día apareció Miguel y no podía hablar. Lo entraron, lo desahumaron con copal, pom, se le rezó por último hasta que Miguel contó que cuando estaba a medio guatal llegó un patojito que no conocía y le dijo que su tata quería verlo. Lo llevó al cerro Julgix y en la entrada de una cueva se le desapareció el mandadero, sólo entonces se fue por la vereda de la cueva hasta llegar junto a un viejo, que estaba en la cueva al fondo, ahí lo esperaba un señor en una hamaca de colores muy alegres; pero al verlos bien se dio cuenta que el trenzado de la hamaca era de culebras de colores, los muebles eran animales, como armadillos y venados. Habían muchos animales como si aquello fuera un hospital. Entonces el viejo le dijo: -decíle a tu tata que deje de estar molestando a mis animalitos, vos podés ver todos heridos por ustedes; mirá que me voy a vengar. Se van a acordar de mí, les voy a mandar mis culebras si siguen molestando en mis lugares sin pedirme permiso.
Luego Miguel se enfermó y a los tres días se murió, pues resulta que ningún curandero quiso hacer nada, porque era venganza del señor del cerro de Tzultatká.
Fue en balde todo lo que hicieron. Por más que Juan ofreció riquezas a los curanderos, que en aquel lugar habían famosos, no quisieron llegar por tratarse de un caso grave. En él estaban puestos el "Dios Guarde", las manos del señor de los cerros y valles, Tzultaká".
Tzultaká, señor dueño de la cosmovisión la literatura oral- q'eqchi', tiene como su alter ego (su otro yo) la leyenda del Negro Aj K'ek. Cuentan en Senahú, que los peones q'eqchi'es, que trabajan en las haciendas de café, temen acercarse a los patios del beneficio, pues puede salirles el Aj K'ek, un hombre negro, muy grande, de aspecto feroz, que según los q'eqchi'es es hijo de las vacas con el sisimite, y que por las noches cuida, danzando y tocando tambores, que los indios no se roben los granos y los sacos de café.
Existen también leyendas históricas que se refieren a la fundación de los pueblos y de los santos patronos. De las más famosas por su belleza es la de San Cristóbal Verapaz, donde se cuenta que San Cristóbal, en los primeros tiempos, pidió permiso al Dios Mundo (Tz'aqol-Bitol), para atravesar el río Cahabón y dejar al Niño Dios y su palmera al paraje Coyolares, pues estaba muy cansado, y le solicitó también al Dios Mundo "que le diera permiso" para fundar un pueblo y convertirse en el Santo Patrón. El Tz'aqol-Bitol le dijo a San Cristóbal que "con mucho gusto", pero que juntos deberían pasar al Niño Jesús por el río Cahabón y ambos serían los patrones del pueblo. San Cristóbal aceptó. Por eso es que en la región poqomchi' las deidades ancestrales comparten con la misma jerarquía el nivel sacro de los santos patronos cristianos.
En la región de las verapaces existen otras leyendas ancestrales de origen mayanse como "La Boda del Sol y la Luna" en Santa Cruz Verapaz, de ascendencia poqomchi', que toma el nombre de "El Señor Sol, la Señora Luna, el Señor Nube y C'agua' Tsa' ", en Chisec. En Lanquín se le denomina "Amores del Sol y la Luna"; en Tucurú, "Amores de C'agua'choc y C'ana'po" y en San Juan Chamelco "C'agua'sa'que' busca a C'ana'po". Esta es una de las más extraordinarias leyendas de la literatura oral guatemalteca.
Uno de los personajes más importantes de las leyendas de Alta Verapaz es el de Juan Noj, quien es una figura que aparece ligada a los ríos y a las faldas de los cerros, en las tardes de niebla o cuando cae "chipi-chipi". Sobresalen las que narran en la región q'eqchi' de San Pedro Carchá. En Fray Bartolomé de las Casas toma el nombre de Juan el Gordo y en el Chahal se le asocia a la leyenda del negro Aj K'ek.
También perviven innumerables leyendas de aparecidos y ánimas en pena en todo el departamento, una de las más famosas es la del "Duende en Lanquín", que conserva todas las características de un espíritu que vive entre cuevas y que molesta a las mujeres. También en Tamahú se habla que el espíritu del río o "animal del agua" asusta a hombres borrachos y enamorados. Las leyendas de la Siguanaba, la Llorona y el Cadejo, viven con gran vigencia en toda el área de Alta Verapaz, tanto en pueblos como en caseríos y aldeas.
Leyenda muy característica de Alta Verapaz, es la del Pozo Vivo en Tactic. Cuentan los ancianos poqomchi'es, que en tiempos idos una mujer muy bella cayó en ese pozo y ya no pudo salir porque "El Espíritu del Agua" se enamoró de ella y no la dejó ir. Desde entonces este pozo, parece estar en ebullición y tira pañuelos de seda, fichas doradas y plateadas, y perrajes, que son parte del tesoro del Señor del Agua. Quien intenta recogerlas, cae dentro del pozo y ya no vuelve a salir, pues se convierte en sirviente de la mujer del Señor de Agua.
Otro tipo de literatura oral, diferente a la anterior, se desarrolla en la ciudad imperial de Cobán. Aunque muy mayanizados, sobreviven hermosas formas literarias occidentales, como cuentos maravillosos. En esta ciudad, en el barrio de Santo Domingo, don Mario Sierra "leng¸etero" del barrio de Santo Domingo, narra el cuento de "El Niño Encantado", que trata de un joven de apellido Tujab, que se escapó de su casa y se fue con un hombre extraño, el que comía ceniza, quien le dio donde dormir y un manojo de llaves. Después de muchas aventuras maravillosas, el joven Tujab se va a vivir a la casa de unos tíos, en Tactic. Allí encuentra una muchacha, se casa y vive muy feliz.
En la ciudad de Cobán se han podido detectar otros tipos de cuentos maravillosos, así también cuentos de animales como Tío Conejo y Tío Coyote, cuentos de Pedro Urdemales, de bandidos mágicos y míticos como Juan Metalbatz.

ORGANIZACIONES SOCIO-CULTURALES
Club Rotario, Sociedad de Beneficencia, Casa de la Cultura, Cámara de Comercio, Pastoral Social, Asoc. Amigos de La Marimba.
CELEBRACIONES
En el mes de mayo, todos los años se lleva a cabo la MEDIO MARATÓN INTERNACIONAL DE ATLETISMO, con un recorrido de 21 Kilómetros. Para este acontecimiento, se invitan a atletas de varios países, quienes envían a sus mejores representantes.
En todos los cantones, aldeas y caseríos celebran la cofradía de su respectivo patrono.
En el mes de julio de cada año se celebra el FESTIVAL FOLKLORICO NACIONAL, siendo éste, una fiesta de la raza indígena, cuyo propósito es enaltecer el espíritu de las etnias, tratar de conocer sus tradiciones, costumbres y bellas artes.
Cobán celebra su feria titular del 01 al 06 de agosto, en honor a su Patrono SANTO DOMINGO DE GUZMAN.
TRAJE TÍPICO
El traje típico de la Mujer, casi no ha cambiado, teniendo especial cariño la gente indígena en conservarlo, salvo algunas piezas que se ven solamente en las grandes ceremonias.
Consta de Güipil blanco de “Kembil” o “Pikbil”, lo confeccionan en telares de mano y tienen la particularidad de que el tejido conlleva en sí figuras de cantaritos, venados marquesotes o bien la manta de tabaco.
LA ENAGUA es de color verde o blanco y rojo, a rayas anchas o pequeñas, toda Señora lo lleva doblado en la sien como corona al peinado, que va atado, al clásico “TUPUY” rojo que es símbolo de alta jerarquía y de fecundación.
CHACHALES Y ANILLOS lleva la mujer enjoyados los dedos de las manos con múltiples anillos de plata, de los que penden patitos, pajaritos, esferas y animalitos del monte, El Chachal de plata es también collar de monedas antiguas o bien de esferas o simples cadenas, que rematan en una gran cruz que se llama Cuansh.
RELIGIÓN
En el municipio existen varias denominaciones evangélicas, alrededor de 10, pero la que predomina es la RELIGION CATÓLICA. También hay actividades en las que participan en su mayoría INDIGENAS, tales como:
El Paabank y en las Cofradias.
Las principales actividades religiosas en el medio son las siguientes:
  • 06 de Enero, Día de los SANTOS REYES, acostumbrando la mayoría de los indígenas, visitar el CALVARIO.
  • 15 de Enero, Día de ESQUIPULAS, la cofradía respectiva celebra por tres días consecutivos y es visitada la imagen que se encuentra en el Calvario.
  • 3 de Agosto se celebran las Cortesías. (saludos a todos los santos).
  • 4 de Agosto Feriado Día de Santo Domingo de Guzmán.
  • 8 de Diciembre, Día de la Virgen de CONCEPCION.
  • 12 de Diciembre. Día de la Virgen de Guadalupe (Aparte de los servicios religiosos en honor ella, la mayoría de los habitantes viste el tradicional traje Típico de la región).
SU IDIOMA
Q’eqchí y Pocomchi.
NUMERO DE HABLATANTES DE LEGUAS MAYAS (censo 1,994)
HABLANTES DE LENGUAS MAYAS
Lengua Habitantes que la hablan
K’iché 397
Kaqchikel 323
Mam 150
Q’eqchí 63,144
Otra Lengua 825
Fuente: Municipalidad de Cobán
CULTURA:

Tiene una extensión territorial de 2,132 kilómetros cuadrados. Su altura es de l ,320 metros sobre el nivel del mar con un alto porcentaje de indígenas kekchíes.
Su distancia de la ciudad capital es de 205 kilómetros a través de carretera asfaltada. Cuenta con un aeropuerto. Cobán fue fundada el 4 de agosto de 1,543 y el rey Carlos V, de España, le concedió el título de Ciudad Imperial. Como ciudad cuenta con todos los servicios básicos a la comunidad, algunas distracciones, mercado permanente, medios de comunicación como radiodifusoras, centros educativos, extensión y centro universitario, transporte, facilidades al turismo, hoteles de primera categoría, restaurantes, cafeterías y comedores.

En el mes de mayo, todos los años se lleva a cabo la MEDIO MARATÓN INTERNACIONAL DE ATLETISMO, con un recorrido de 21 Kilómetros. Para este acontecimiento, se invitan a atletas de varios países, quienes envían a sus mejores representantes.
En todos los cantones, aldeas y caseríos celebran la cofradía de su respectivo patrono.


En el mes de julio de cada año se celebra el FESTIVAL FOLKLORICO NACIONAL, siendo éste, una fiesta de la raza indígena, cuyo propósito es enaltecer el espíritu de las etnias, tratar de conocer sus tradiciones, costumbres y bellas artes.
Cobán celebra su feria titular del 01 al 06 de agosto, en honor a su Patrono SANTO DOMINGO DE GUZMAN.

Centenaria ciudad guatemalteca designada como Ciudad Imperial por el rey Carlos V. Fue fundada por el fraile Bartolomé de las Casas luego de que los españoles fracasaran en la conquista de sus habitantes.
Tan aguerrida fue la resistencia de los pobladores que los conquistadores la llamaban Tezulutlán (tierra de guerra). Fray Bartolomé de las Casas evangelizó a los pobladores, quienes, luego de convertirse al cristianismo, aceptaron someterse pacíficamente a la corona española. Por esta razón, la región fue nombrada Verapaz (verdadera paz).
Cobán es uno de los centros de cultura indígena de Guatemala. Se destaca el evento Rabín Ajau (Literalmente: Hija del Señor o Cacique) donde se elige a la reina indígena con la participación de todas las etnias indígenas del país. No es una imitación de los eventos comerciales de belleza. Es algo que realmente vale la pena verlo por su colorido y riqueza cultural. Este evento se realiza durante el mes de agosto.
El paisaje cobanero es muy hermoso. En sus bosques abunda el pino y las fuentes de agua cristalina.

Vegetación Alta Verapaz
El traje indígena es portado con orgullo por muchas de las damas de la ciudad dando un toque multicolor al panorama citadino.
El clima es templado con tendencia a frío. En ciertas épocas del año cae una llovizna constante que se conoce como el "chipi chipi".
En las montañas que rodean Cobán todavía se encuentran ejemplares del quetzal, la bellísima ave que ha sido declarada símbolo nacional de Guatemala. Camino a Cobán se encuentra el Biotopo del Quetzal, donde, con suerte, algunas veces puede admirarse esta ave en su hábitat natural.
Cuando visite Cobán, no deje de pasar por El Calvario, monumento a la fe católica de sus primeros pobladores. También vale la pena visitar Las Islas, balneario natural en la aledaña población de San Pedro Carchá. Si es aficionado al fútbol, no olvide asistir a los entrenos y partidos de fogueo del Cobán Imperial.










 


UNIVERSIDAD RAFAEL LANDIVAR
FACULTAD DE  CIENCIAS POLITICAS Y SOCIALES
ANTROPOLOGIA
LIC. SAQUIL



TRABAJO: 
DIFERENTES CULTURAS DE ALTA VERAPAZ






GERMAN ADOLFO TUT CAAL                          2236609
SHIRLEY LESLY AMALY CUQUEJ SI               2498507
MAX ALFREDO OCHOA RAX                            2062309
VICTOR INOSENTE  XOL CAO                         2249209                     
GLORIA RUIZ CAAL                                           2142309
MARVIN TUT  SI                                                 2165609
KARIN AMALIA QUILEB                                   2311009
SURAM

13 DE NOVIEMBRE  DEL AÑO 2010